jueves, 27 de marzo de 2008




Mi Lu
mi lubidulia
mi golocidalove
mi lu tan luz tan tu que me enlucielabisma
y descentratelura
y venusafrodea
y me nirvana el suyo la crucis los desalmes
con sus melimeleos
sus eropsiquisedas sus decúbitos lianas y dermiferios limbos
y gormullos
mi lu
mi luar
mi mito
demonoave dea rosa
mi pez hada
mi luvisita nimia
mi lubísnea
mi lu más lar
más lampo
mi pulpa lu de vértigo de galaxias de semen de misterio
mi lubella lusola
mi total lu plevida
mi toda lu
lumía.


(Oliverio Girondo, poeta)





No fue un sueño, lo ví:
La nieve ardía.


(Angel Gonzalez, poeta)

domingo, 23 de marzo de 2008




- Monsieur quiero danzar por cubierta, bailotear con vos y con el viento... me subiré sobre la punta de vuestros pies y giraremos y os besare atropelladamente y os demostrare lo dichosa que soy y os mirare con devoción... !Ohhhh... cuanto os amo, Monsieur!. Y quiero ponerme ese vestido de dama elegante que me regalasteis y quiero que me digáis lo hermosas que lucen las estrellas esta noche y me susurréis lo que me amáis, ¿eh?... Y quiero sentir vuestras manos recorriendo delicadamente mi espalda mientras damos vueltas como si el mundo y la mar nos perteneciesen y que nos riamos de los locos que transitan por lugares donde no huele a salitre y quiero beber ron de vuestra boca y no detener nuestra danza y quiero que me supliquéis con fervor que abra mis piernas para vos cuanto antes porque me deseáis tanto... y quiero bailar, bailar, bailar contigo, Monsieur... ¿Sonreís con agrado?... Y tengo también otro antojo... Un capricho, una menudencia sin importancia... Concededmelo... Me haría tan feliz... Os lo ruego... ¿Veis a ese hombre que monda unas mandarinas? Si, aquel... el hombre de las mandarinas... pues antes de bailar con vos deseo yacer-copular-aparearme-tenderle-follar con él... ¿Si? ¿Si? ¿Si mon amour... mon petit trésor?
- !Zorra!
- !Egoísta! (aullo)


sábado, 22 de marzo de 2008




El Niño de los Espejos improvisa acrobacias sobre los lavabos para asomarse y quedarse a vivir en la Luna.
Los grifos son las ramas de un árbol que le impulsan sobre tejados, lomas y atalayas; las pastillas de jabón las usa a modo de trineo que le facilitan ascensos siderales y las toallas son sus alas y, aveces, cometas blancas de papel.
El Niño de los Espejos posee una maleta donde esconde once razones que se cuentan con palabras-verbos del revés y fecundas silabas-añiles... Y un reloj sin arena. (Llévame)



Vuestra insolencia me estimULa Monsieur Lafitte pero... esta noche me inclino por la compañía de mi gato. Salid del aposento.
Mis respetos.


sábado, 15 de marzo de 2008




Mientras me enjabonáis la espalda os contaré un cuento de Princesas desconocidas y olvidadas, Monsieur... No sé si os placerá más que os hable de la Princesa Efímera o sobre la Princesa Amnesia... !Eh! !Tened cuidado no soporto que me entre jabón en los ojos!... Claro que la vida de la Princesa Plisplás Nomeverasmás tiene su encanto... No sé... No sé... frotad más suavemente... Si, así... El caso es que no sé decidirme... La historia de la Princesa de Pietrapersia creo que os gustará porque se subió a una torre, de sus faldas sacó una cometa almidonada y cerro los ojos y cuando los abrió, volaba y ya sé que a vos os fascina todo lo volátil y tornadizo... En el fondo sois tan encantadoramente versátil... No, el agua no esta fría aun, esta deliciosa... Pero no penséis que la Princesa de Pietrapersia llego muy lejos, no... mas bien se quedo a mitad de ningún camino... !Shhhh...! !No me interrumpáis! !¿Como queréis que no pierda el hilo del relato si no apartáis la mano de ahí?! Pues como os contaba... aquella Princesa no alcanzó a... Pero estoy pensando en que tenía que ser muy animosa y audaz para subir a aquella atalaya, ¿no creéis?... porque no puedo evitar imaginar unas sombrías y húmedas escaleras de caracol... !Mirad hasta se me eriza la piel de solo pensar en ellas!.... ¿Os he dicho Monsieur como me gustan vuestras manos?...¿No?, pues os lo digo ahora: como me gustan tus manos... El caso es que la Princesa de Pietrapiersa perdió los zapatos mientras se elevaba y jamás los volvió a encontrar y... ¿Que?, si, si claro, claro que os beso... acercaos un poco... Solo un poquito más.
M
A
S




- Medio kilo de hojas-amapolas.
- Un melocotón de Calanda sin pelar.
- Una bola de alcanfor.
-Treinta terrones de azúcar y las peores intenciones en siete granos de arroz.

El tiempo de cocción dependerá de las prisas...
Se servirá a temperatura ambiente o hielo bien picado dependiendo de las estaciones o del momento y en una copa de cristal, si puede ser de Bohemia. Mientras el invitado bebe no se tiene que perder la calma, ni instigar a que trague mas aprisa. Se mantendrá una sonrisa beatifica que no parezca mueca y un exquisito cortejo, sin excesos para que no se levanten sospechas. Si protesta por el dulzor del "néctar" hacer como si no se hubiesen oído sus palabras, si por el contrario se queja de amargor añadir solícitamente tan solo media cucharadita de miel de enebro. Es primordial mantenerle a una prudente distancia, es decir, que no se acerque mucho ni se levante del sofá, o silla, donde asentó sus nalgas por eso de eludir delirios de amor, impetuosas carantoñas u otras vehemencias fuera de contexto. A continuación, y si es posible, respirar profundamente y soportar su parloteo-de-dobleces-artimañas con mirada arrobada y prestarle una atención de divina complaciencia. Y por último esperar: en diez minutos se podrá celebrar y bailar la ausencia-muerte de un hijo de puta menos.
M
E
N
O
S

jueves, 13 de marzo de 2008




(L'homme-enfant-ailes-de-mouette m'enveloppe le coeur... Je l'observe et l'embrasse du revers.)

Allí donde las palabras huecas caen se quedan quietas y tan solo hace falta el paso de un minuto para que agonicen, sucumban y se desvanezcan.
He pensado inventar y tejer palabras que estén colmadas de vegetación, globos, semillas, violines, astros... para que floten eternamente-siempre a la altura de tus ojos y bailar entre ellas como si fuésemos siluetas-azules de cualquier lienzo de Chagall.
Ese sería mi último momento.

miércoles, 12 de marzo de 2008


A Monsieur Lafitte le agrada que llegue la hora de los postres. (A mi también)

A Monsieur Lafitte le fascina Jugar-a-Colar-Cerezas por mi escote. (A mi también... y el movimiento de sus manos-planetas)

A Monsieur Lafitte le provocan y le enardecen las risas escurridizas-mías y mi pose indolente. (A mi también... y la suya-instintiva)

A Monsieur Lafitte le brillan a la luz ambarina de las velas, perturbadoramente, los ojos y los colmillos en cada lance. (A mi también... y su mirada-glauca)

A Monsieur Lafitte le seduce predecir las posibilidades que tiene el fruto de rodar hasta la cima de mi pubis y allí, oscilante, voluptuoso e insinuante, detenerse. (A mi también... y sus divagaciones)

Pero... a Monsieur Lafitte le inquieta el disgusto que supone comerse una Cereza... (A mi no, eso no) porque Monsieur las aborrece y las maldice... sin embargo, acaba gateando y trepando hasta alcanzarme las rodillas, serpenteando por mi ombligo y llenándose la boca de Ellas porque siempre Amó y Adoró Mi Coño.

(Bésame, mi amor)





sábado, 8 de marzo de 2008




Una inacabada piedra-tótem se alza en medio del jardín del Invernadero de Ámbar, y a la sombra, pétrea-diamantina-lunar, de aquella mole encumbrada y profanadora del cielo esta él.
No creo que note mi presencia aunque Sé que intuye que le observo expectante y muda desde los escalones. Me huele. Me olfatea. Me absorbe.
Inicia un lento caminar en círculos, acariciando la roca como si fuese la piel de una mujer: su mano extendida, amplia, dilatada... La mima. La agasaja. La ama.
Sus dedos se asemejan a pequeñas aves migratorias que emiten cánticos entre oquedades, pliegues y hendiduras.
Con los movimientos de un felino comienza a desnudarse; las prendas van quedando atrás ocultando sus pisadas como si fuesen delicados pétalos pálidos, y ajeno al frió, allí las abandona.
Avanza un paso, dos... se detiene repentinamente; parece que un latigazo, un puñetazo brutal, un arañazo feroz le arrebatan del ensimismamiento. Delirante, en un salto, se transforma en Hacedor de Piedra: la entrelaza con furia, se disputan la fuerza, choca contra ella, pugnan una dura batalla, la desafía...
Doy un respingo. Jadeo-Jadea.
Bruscamente frena, se demora, la tantea, la colma, susurra, canturrea, la explora, se apacigua, se amansa, se hace frágil.. y otra vez en un súbito impulso, de nuevo se acelera, la instiga, la provoca, la baila una danza ancestral... Salvaje-Desigual-Delirante.
Saltan y salen despedidas chispas a la oscuridad y culebrillas de luz de aquel animal-totémico con cada golpe-caricia que él descarga... miro su trayectoria incandescente y me siento temblar sin querer descifrarme; un cosquilleo venido de lejos me inunda el vientre y no me atrevo, ni atino a respirar por si no queda aire.
Oigo el aleteo que produce el mundo cuando se detiene.
La noche es tragada por una quietud redonda y en espirales. Desaparece.
Y es entonces cuando deseo acercarme a sondear con mas profundidad en su mirada y deslizarme, pero si me pongo en pie las piernas no me sostendrán... Trémula-Estremecida-Liquida... Espero.
Le espero...
Él es ahora Azul y... Cósmico

viernes, 7 de marzo de 2008



Salto...

Monsieur Lafitte desgarra inútilmente el borde de mis enaguas en un precipitado gesto de intentar evitar la caída.
Al minuto siguiente bracea rápidamente entre las olas pretendiendo ¿salvarme?.
Cincuenta pares de ojos desorbitados nos observan desde el pretil como esperando un desenlace fatídico.
Saludo con la mano y les lanzo un beso aéreo.
Tomo aire y me sumerjo... cuando un tirón súbito, brusco, enérgico, me hace emerger a la superficie y siento vértigo.
- !Aparta! !Quiero ver el fondo del mar!


jueves, 6 de marzo de 2008

"Incluso, deformada y mutilada, la vida continua" parece querer decirme el Hombre que Luce del Color de las Mandarinas.
No podría negarle, sin ninguna duda, que las siestas, los crepúsculos, los soles se suceden; pero yo le (te) siento tan rasgado... que no me convence esa manera incesante de llevar, como soldadas a la piel, tiritas y vendas y asumir sin rechistar que esas fueron las señales que dejaron las tormentas y las tronadas al paso de la Vida... y pretender sentirnos consolados y casi agradecidos.
Mi ruta-cosmo(i)lógica no dista mucha de la suya y danzamos sueños y alborotos similares, un finísimo hilo de plata unió nuestros ombligos hace mil años... pero él, quizá, se hizo adulto bruscamente y yo me quedé, cómoda e indolora, contando hormigas y cometas.
Trenzo flores y danzo: Soy la Puta de un Corsario (reverencias)




De pronto él me miró y sus ojos ejecutaron una danza salvaje, primaria, guerrera, insolente y temeraria desafiando al cielo, la tierra, los animales, la luna... y a mi.
Reflejos de antiguas tormentas y diluvios inundaban y alteraban el color de su circular y hermoso iris: líquenes, nimbos, humo, ceniza, esmeraldas...
Y supe, y sin pedir clemencia, que era la hora de las ofrendas y de los cánticos.
Nuestras Bocas traían Hambre y Urgencia de esos mismos Labios-Nuestros...
Yo mordí.

miércoles, 5 de marzo de 2008



Contemplo la punta de sus pies.
Miro la punta de mis pies.
Contemplo la punta de sus pies.
Miro la punta de mis pies.
Me fascinan las puntas de ambos pies...
- Dime, ¿si a diez le restamos diez cuantos son?
- Cero.
- ¿Y el resultado de dos menos dos cual sería?
- También cero.
- Entonces el resultado final seria cero en Todo
- ¿En todo?
- Si, en Todo... ni dedos, ni pies... Cero.
- Ni dedos, ni pies... ¿Que queréis decir?
- !Que necio sois! pues que si no tenemos...
- !¿Como te atreves?!
- ... si no tenemos pies no podríamos caminar, ¿verdad?
- Cierto.
- Pues dame mi sombrero que seguro que hará viento y no quiero despeinarme... Ahí esta, sobre la cómoda...
- Mademoiselle, ¿acaso pensáis que os permitiré corretear caprichosamente a vuestro antojo?
- !Monsieur Lafitte, eres un majadero! !¿Como vamos a correr por ningún lugar si carecemos de pies? ¿Acaso ahora contradices y niegas el resultado de la resta?... Acercame también el chal que no quiero enfriarme... Tu mismo lo dijiste: cero
- !Basta! !No, no tenemos pies, ni...!
- Querido, por fin lo has comprendido !Te amo tanto, tanto, tanto...! En vez de caminar, salgamos y... y... y... !Volemos!


martes, 4 de marzo de 2008



- !Kazajstán!
- ¿Cómo?
- Vayamos a Kazajstán ...
- Ese lugar no aparece en ninguna ruta marítima y no creo que sea posible...
- !No importa!
- No hay mapas...
- !Bah..!
- ¿Te has vuelto loca...?
- ¿Me das un masajito en los pies Mon Amour...?
- ¿Me estas escuchando?
- No
- ¿En que dirección se encuentra?
- Hacia allí...
- Hacia allí no es ningún lugar concreto; indicame alguna orientación... Mediodía... Naciente...
- !Hacia allí!.. !Allá!... !Más lejos y... y.... y ya está!
- ¿Es isla? ¿Estepa? ¿Selva...?
-¿Me das un beso?
- !No!... ¿Hace frío o calor?
- Me cubría un hermoso vestido de tul, un sombrero haciendo juego amarillo-limón y un parasol...
- !Parfait! Navegaremos hacia los vientos cálidos; las Perseidas nos invitarán a tumbarnos en la hierba...
- ... y calzaba unas sandalias pero...
- ¿Pero?
-... nevaba tanto en Kazajstán.
- !Máldita ramera!
(sonrío-gatuna)
- Mi adorable cabrón... Te amo.






lunes, 3 de marzo de 2008



Me decía:

mujer serpiente, mujer de opio, mujer de arena, mujer inventora de planetas, mujer con zapatillas-verdes de bailarina, mujer de pies en blanco y negro, mujer de largos paseos sin pisar tierra, mujer de pelo donde viven las cigüeñas, mujer de ombligos y mariposas, mujer extraña, mujer gorrión, mujer entrañable colmada de gestos, mujer caprichosa, malcriada, consentida... mujer aventurera, mujer hecha con tierra y zumo de ciruelas, mujer de la sangre y las arterias, mujer de rosáceos dedos, mujer de humo, mujer azucarada, mujer primaria e instintiva, mujer rastreadora de hormigas, mujer de volteretas y pequeños saltos mortales...

Después le abandoné

domingo, 2 de marzo de 2008



Escuché una voz gritándome: "!Agarraté!"
pero yo cerré los ojos y aflojé los dedos... se oía desde tan léjos...
(Caigo al lugar Donde el Corazón se Transforma en Algas)







Pum...
Pum...
Pum... dice mi corazón al embarcar

Daniel-alas-gaviota puntualiza que no se me ve... supone que embarco difusa, ni siquiera en blanco y negro. Sin bordes. Abstracta.
(¿Qué pasará cuando me alce las enaguas y la falda?)
Monsieur Lafitte me contempla con ojos insondables.
"Bienvenu, mon amour..." Y se sonríe-gatuno.